¿Cómo funcionan los microespiones?


Los microspiones funcionan grabando sonidos e imágenes de su entorno. Pueden estar diseñados para grabar continuamente o sólo cuando detectan un sonido. Los microspiones pueden ser con cable, lo que significa que están conectados a un dispositivo externo, o sin cable, lo que los hace más fáciles de ocultar y mover. Los microspiones inalámbricos transmiten las grabaciones a un dispositivo externo a través de una conexión inalámbrica, como Bluetooth o Wi-Fi. Las grabaciones pueden almacenarse en una memoria interna o en un dispositivo externo, como un ordenador o un teléfono móvil. Es importante respetar las leyes locales de privacidad y vigilancia cuando se usa un microespía.